Buenas!!!!! Qué tal? Espero que bien :)
Os regalo unas flores para empezar y romper el hielo ;-) Éstas son las mismas peonías del último post, o más bien, lo que queda de ellas. Las flores tardaron una eternidad en abrirse, llegué a pensar que no las vería abiertas. Sin embargo, en cuestión de una noche se abrieron todas, ¡y de qué manera! Levantarme en la mañana y ver cómo aquellas enormes flores color rosa se asomaban desde el jarrón me pareció un verdadero milagro. Una metáfora de que todo (o casi todo) es posible, de que lo mejor está aún por llegar. Hay que tener esperanza, hay que saber esperar.
Fue una forma magnífica de empezar el día.
Y para seguir con un día estupendo os traigo una sencilla tarta de champiñones que espero os guste. Sencilla, sabrosa y también vistosa. Gracias a su aspecto rústico, es de esas tartas que gustan nada más verlas. Como cualquier pastel de este tipo, es fácil de adaptar a nuestros gustos o sencillamente, a las verduras que tengamos a mano. Son versátiles y agradecidas.
La acompañamos con un vino blanco fresquito y una buena ensalada. Ideal para una cena de viernes, cuando intento pensar en platos un tanto más especiales. Es importante darle un buen recibimiento al fin de semana, ¿verdad? Sobre todo si pensamos que lo mejor está aún por llegar…. o más bien, que lo mejor es eso que estamos viviendo ahora, y que es al momento presente al que deberíamos rendirle todos los honores.
Bueno, y para terminar ese día tan estupendo, pasemos de estos temas un poco metafísicos a otros más mundanos, como es un paseo por Norra Mälarstrand, o lo que es lo mismo, la Playa Norte del Mälaren. Resulta que es domingo, que hace un tiempo de escándalo y que hay que salir a la calle a disfrutarlo. Con el coche de los niños a cuestas andamos 5 km hasta llegar al Ayuntamiento, donde terminamos comiendo un perrito caliente, todo un clásico que tomado en plena calle, a mí siempre me sabe a gloria. Y un mjukglass de vainilla, un helado de consistencia muuuuy suave que nos encanta y que llevaba sin comer desde el verano pasado. Mejor, imposible.
A lo largo de este paseo te puedes encontrar de todo un poco: bares y restaurantes flotantes, barcos que alojan discotecas, parques infantiles, puntos de venta de embarcaciones menores, estatuas que te saludan al pasar….y gente, mucha gente corriendo o caminando.
Hoy tiré la última peonía, ésa que en la foto aún no se ha abierto del todo. Su tiempo ya había terminado, y siempre me da un poco de pena ser testigo del efímero esplendor de las flores. Pero la vida es así y hay que disfrutar de su belleza antes de que éstas se marchiten. Luego vendrán otros capullos, otros jarrones, otras flores…Pero eso ya es otra historia, y la de hoy es la que importa.
Sed felices hoy, no lo dejéis para mañana.
Que buena pinta!! y que preciosas fotos!
Como me gusta ver las fotos que pones, consigues que vea con tus ojos. La tarta riquísima seguro.
Bss
Elena
:) qué post tan completo, el perfecto para irse a dormir con el corazón contento: unas fotos preciosas, una receta estupenda y sabias palabras…
Hice ese paseo cuando estuve en Estocolmo hace unos 3 años y me han venido muchos buenos recuerdos.
Un beso, Lena! ;)
que rica Lena es de las tartas saladas que ya se que me van a gustar. Se me habían olvidado tus muffins y eso que tenían una pinta exquisita, me ha encantado el paseo que me he dado por Riga, gracias por hacernos soñar un poquito.
besos
Esther
Así me gustan a mí las tartas, rústicas, de esas que no da miedo comer, de las que apetece comer, de las que se ve que han hecho manos humanas ;)
Me ha chiflado Elena
Tengo muchísimas ganas de hacer este tipo de tarta, siempre que las veo digo lo mismo, aparte de ser fotogénicas :) La opción que presenta me gusta y convence, no creo que tarde en hacerla. Tus paseos preciosos como siempre. Un besazo
Un paseo delicioso acompañado de esta deliciosa tarta, suave y delicada como tus palabras.
Besos!
Como me gustan tus flores, como me gustan tus fotos, como me gustan tus relatos y siii, que rica tiene que estar esa galette de champiñones. Me relaja un montón visitar tu rinconcito y pasarme un ratillo deleitarme con tu delicadeza y buen gusto. Bss
Que bien que nos enseñes las peonias abiertas son tan bonitas. La tarta rica, sana, y tibia deliciosa seguro. Tus paseos y viajes me encandilan, qué envidia!
Un beso
Creo que voy a pedir que me adoptes! pero que cosas mas deliciosas preparas y demás nos sacas de paseo, no se puede pedir mas.
Un beso
Como me gusta Estocolmo!!! Que ciudad tan bonita!! Me sorprendió tanto!
Me encanta la receta y las fotos.
Un besito,
Lili
Vaya, esta es una de esas recetas que me gustan a mi: “Sencilla, sabrosa y también vistosa”. Sobre todo lo de sencilla ;-). Sin duda la hago este fin de semana, se ve muy rica. Ya te contaré!
Que buen paseo. Estocolmo es bello y mas con un poquito de sol y calor.
Las flores bellas!
Oyoyoyoyoyoy…creo que hoy me quedo a merodear por tu blog un buen rato. Este finde tengo a mis suegros de visita y estoy preparando un menú para estos días. No se me me ocurre mejor sitio para encontrar lo que busco que tu rinconcito. Y es que, como muchas veces te he dicho, todo lo que haces me encanta. Compartimos gustos culinarios, está claro. Esta tarta de champiñones entra en el lote. Mmmmm qué deliciosa se me antoja !!!
Me pasa como a ti nada más ver estas tartas ya me gustan, pero yo tengo que poner remedio aun no he hecho ninguna.
Gracias por compartir rincones tan bonitos.
Un beso y feliz fin de semana
tengo ganas de hacer una tarta de este tipo. Y por una cosa u otra nunca cae. Tu receta se ve estupenda. El paseo extraordinario. Y tus flores preciosas, aquí en España es muy díficil de encontrarlas y además son super caras. Bss
Hoy tengo para comer lasaña de portobello y calabaza, y nos han sobrado un montón de champis, ¿¿me guardo la receta?? Con ricotta y feta tiene que estar sensaciones, así que te la quito :P
Un besito, y gracias por traernos de nuevo las peonías, ¡¡me encantan!!
PD: Cuánta razón tienes en lo de lo efímero de las cosas buenas, y qué de veces lo olvidamos. Creo que hoy me ha venido genial, porque estoy modo bajón ya que el lunes se me acaban las vacaciones, en lugar de disfrutarlo a tope.
Me quedo con lo de no dejar para mañana lo de ser feliz ;)
Me encantan las fotos de las peonías, te han quedado preciosas. La tarta tiene muy buena pinta pero yo tengo que hacerle un tunning tremendo porque los champiñones y yo nos llevamos a matar. Mira que aquí me podría inflar a setas ricas pero no… por ahí no puedo pasar :P Un besazo.
Cuanta razón tienes…ser feliz hoy y no dejarlo para mañana, me gusta tu forma de entrar al fin de semana…me pasa lo mismo el viernes me encanta hacer algo diferente….las flores tienen un color precioso…y la tarta te digo que la hago, esta semana no que estoy liada pero la dejo para el próximo viernes…..
Me ha encantado este optimismo que desprendes…genial!!!
muchos besos
Me gustan mucho estas tartas saladas y ésta es casi una coca y muy sencilla. La masa me ha encantado. Y las fotos!!!
Besitos y besotes
Esas fotos me traen tan buenos recuerdos…. me consolaré con tu tata, que mona, siempre te quedan preciosas, mi chico querrá ponerle mozarella y provoleta, como si lo viese! Besos
Las tartas saladas me vuelven loca, son muy versátiles y para esta época del año sensacional!!!!las fotos preciosas!!!!besos
Las tartas saladas me encantan y esta se ve estupenda, reconfortante y sabrosa.
¿Te he dicho ya cuánto disfruto con tus fotografías?
Besos.
¡Cómo me encanta leer todo lo que cuentas! Me imagino la vida allí acostumbrada a lo de aquí, tendría que ser toda una aventura. Qué cosa tan fantástica.
Igual que esas flores y esta tarta, ideal para una cena de viernes, sí señor. Y con ese vinito y una ensalada maridando ya ni te digo! Muuuá
Pero que preciosidad de fotos, que ciudad tan linda, me has transladado a tú paseo, que lindo se ve todo, y además terminas el viernes con una tarta fabulosa, nosotros los viernes nos damos un “descanso” y no tenemos un orden, Sergi se acuesta muy temprano por lo que muchas veces no nos apetece entrar en la cocina para cocinarnos algo para nosotros, jajaja…feliz fin de semana
Hola, Elena. Un placer tu recorrido por la ciudad. En cuanto a la tarta, ciertamente mi presentación favorita es esta versión rústica, casi como al descuido. Con estos ingredientes, incluso, me transporta a las campiñas galas.
Un placer pasar por tu cocina. Cariños,
Silvia
Qué buenísima pinta! me apetece mucho preparar una galette como esta, con los bordes metidos hacia dentro. Hay que ver cómo cambia un plato variando la presentación, verdad?
Me la apunto para una de esas cenas de viernes que no sé qué preparar ;-)
Me están entrando unas ganas tremendas de volver a visitar Estocolmo!!!!
Besotes